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This sermon series includes the following messages:
Los oficiales del gobierno nos advierten que otro ataque contra los Estados Unidos es probable y a pesar de sus esfuerzas para proteger, no estamos garantizados de nuestra seguridad. Entonces no eres el único que se siente así. Todos nos hemos sentido inestables desde que los terroristas atacaron nuestra nación.
Con cualquier alerta remotamente relacionada a la actividad terrorista que vemos por los medios de comunicación, algunos tiemblan, temiendo que el ataque podría ser en cualquier lugar – al otro lado de la calle, en el trabajo, en casa, o hasta en la atmósfera o en nuestra agua. Otros se preocupan que su negocio o fondos de retiro no sobrevivan en esta economía.
Sin duda, estos tiempos son de temor para muchos. Aun hay buenas noticias para reportar. Pero no las encontrará en sus noticias locales. Las buenas nuevas se encuentran en la Palabra de Dios. Ella declara que aunque somos humanos débiles y vulnerables, los hijos de Dios pueden encontrar fuerza y gracia en Él aun en circunstancias debilitantes. De hecho, Sus recursos son tan abundantes que Él a menudo demuestra Su poder por medio de nuestras debilidades (2 Corintios 12:9).
En un mundo que teme la muerte, que vive en completo vacío, y que no tiene esperanza o paz, el pueblo de Dios puede estar firme como testimonio que Él está vivo y trabajando gloriosamente, ministrando a los corazones de Sus queridos.
Aquí hay algunos principios bíblicos que confiamos calmarán su corazón con contentamiento, aun cuando lo único que puede sentir ahorita es debilidad y preocupación.
Enfrente la muerte con confianza
El primer principio es este: la muerte es inevitable para todos. ¿A primera vista, eso no parece ser una cura para la ansiedad para nada, verdad? Pero a menos que uno realice que esto es una realidad, ninguno de los otros principios en esta lista le proveerá contentamiento.
Hay muchas formas en que uno puede morir, sea por ataque terrorista o por “causas naturales”, pero cualquier muerte lo lleva ante Dios en juicio (Hebreos 9:27). ¿Estás preparado para ese juicio? ¿Tienes confianza que Dios te librará? ¿En qué basas la esperanza de la aceptación eterna de Dios? Instamos que examine su estado espiritual ante Dios.
Cuando ya haya establecido el asunto de su destino eternal después de la muerte, la Escritura dice que puede tener confianza en la cara del peligro. Usted ha aprendido el consuelo que Jesús dio cuando dijo:
Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno. ¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre. Pues aun vuestros cabellos están todos contados. Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos (Mateo 10:28-31).
Enfrenta mañana con esperanza
Hay veces en que puedes perder el enfoque de tu seguridad después de la muerte y tiemblas por el mañana. Dios, en su compasión paternal por nuestras debilidades como niños, nos ha dado instrucciones bíblicas de cómo enfrentar esa clase de preocupación y ansiedad. Mateo 6:25-34 contiene instrucciones para la paz y el contentamiento. En este pasaje, Jesús nos da tres razones por las cuales no nos debemos preocupar por esta vida: La preocupación es innecesaria por el Padre, inusual por nuestra fe, e imprudente por nuestro futuro.
Innecesario por nuestro Padre: Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? (vv. 25-26)
Inusual por nuestra fe: ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombre de poca fe? (vv. 27-30)
Imprudente por nuestro futuro: No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal. (vv. 31-34)
Enfrenta esta día con acción
Así como Mateo 6 es la gran declaración de Jesús sobre la preocupación, Filipenses 4 es la carta del apóstol Pablo sobre cómo evitar la ansiedad. La enseñanza es muy clara, obligatoria, y directa. En Filipenses 4:6-9, Pablo dice que no nos preocupemos, pero no te deja allí. Él te ayuda a llenar el vacío dirigiéndote hacia pasos positivos: oración correcta, pensamiento correcto, y acción correcta.
Oración correcta: Por nada estéis afanosos; sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús (vv. 6-7).
Pensamiento correcto: Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad (v.8).
Acción correcta: Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de paz estará con vosotros (v.9).
Reflexiona en la verdad de Dios expresada en estos versículos, medita en la Biblia – especialmente los Salmos – y encontrará su corazón lleno de mucha paz que permanece, no importa la circunstancia ni las incertidumbres que lleguen.